Cómo hacer pan de masa madre desde cero: guía completa para principiantes

El pan de masa madre ha ganado popularidad en todo el mundo, no solo por su sabor complejo y su textura artesanal, sino también por sus beneficios digestivos y su carácter natural. Sin embargo, muchas personas piensan que hacerlo en casa es demasiado complicado.

La verdad es que hacer pan de masa madre requiere paciencia y cuidado, pero no es difícil. Con esta guía completa aprenderás todo lo necesario para comenzar tu viaje panadero con masa madre, desde crear tu propio fermento hasta hornear tu primer pan.


¿Qué es la masa madre?

La masa madre es un fermento natural hecho únicamente con harina y agua, donde levaduras salvajes y bacterias lácticas se desarrollan con el tiempo. Es el sustituto natural de la levadura comercial.

Ventajas del pan de masa madre:

  • Sabor más complejo y ácido (agradable)
  • Mejor conservación (dura más días sin endurecerse)
  • Más digestivo, gracias a la fermentación lenta
  • Sin aditivos ni levaduras industriales

Paso 1: Cómo crear tu masa madre desde cero

Ingredientes:

  • Harina (preferiblemente integral para empezar)
  • Agua (sin cloro, a temperatura ambiente)
  • Un frasco de vidrio limpio

Día 1: Iniciar el cultivo

  • Mezcla 50 g de harina integral con 50 ml de agua
  • Remueve bien, tapa el frasco (sin cerrar herméticamente)
  • Deja reposar a temperatura ambiente (21–25 °C)

Día 2–4: Alimentaciones diarias

  • Notarás burbujas y olor ácido
  • Desecha la mitad y agrega 50 g de harina blanca + 50 ml de agua
  • Mezcla y repite cada día a la misma hora

Día 5–7: Masa madre activa

  • Cuando duplica su volumen en 4–6 horas, está lista
  • Huele agradable, burbujea y flota en agua
  • Puedes guardarla en la nevera y alimentarla 1–2 veces por semana

Paso 2: Receta básica de pan de masa madre

Ingredientes:

  • 500 g de harina panadera
  • 350 g de agua (70% hidratación)
  • 100 g de masa madre activa
  • 10 g de sal

Paso 3: Proceso paso a paso

1. Autólisis (opcional pero recomendable)

  • Mezcla la harina y el agua
  • Deja reposar 30–60 minutos antes de añadir masa madre y sal

2. Amasado

  • Incorpora la masa madre y luego la sal
  • Amasa por 8–10 minutos, o haz pliegues con reposos si prefieres técnica sin amasado

3. Fermentación en bloque (bulk)

  • Coloca la masa en un bol aceitado
  • Fermenta por 4–6 horas a temperatura ambiente, haciendo pliegues cada 30–45 minutos

4. Formado

  • Vuelca la masa sobre la mesa
  • Dale forma de bola o batard con tensión superficial
  • Deja reposar 20 minutos, luego realiza el formado final

5. Segunda fermentación

  • Coloca en un banneton o bol forrado con tela enharinada
  • Cubre y deja fermentar 1 a 2 horas a temperatura ambiente o 12–16 horas en nevera

6. Horneado

  • Precalienta el horno a 250 °C con una olla o piedra dentro
  • Greña el pan (haz cortes con cuchilla afilada)
  • Hornea tapado 20 minutos y destapado otros 25–30 minutos

Consejos clave para el éxito

  • Usa balanza digital, no midas con tazas
  • Ajusta el agua según el tipo de harina
  • No apresures la fermentación
  • Si la masa se desinfla al tocarla, sobrefermentó
  • Si está muy densa, le faltó fermentación

¿Cuándo alimentar tu masa madre?

  • Si horneas 2–3 veces por semana, mantenla en nevera y aliméntala 1–2 veces
  • Si no horneas seguido, puedes secarla y almacenarla como polvo
  • Si huele mal o cambia de color, descártala

¿Por qué mi pan no sube?

  • Tu masa madre no estaba activa
  • Mala fermentación
  • Amasado insuficiente
  • Horno poco caliente
  • Corte mal hecho (greñado)

Variantes que puedes probar

  • Pan con semillas: añade girasol, chía o sésamo
  • Pan de centeno: cambia parte de la harina por centeno
  • Pan integral: usa 50% o más de harina integral
  • Pan con nueces, frutas o hierbas

Conclusión: Hacer pan de masa madre es un arte, no una ciencia exacta

Cada pan será distinto. Con cada intento aprenderás algo nuevo. La masa madre conecta con una tradición milenaria de panificación natural y saludable. No necesitas herramientas caras ni experiencia previa, solo paciencia y constancia.

Comienza hoy mismo tu cultivo y pronto estarás disfrutando de panes increíbles hechos con tus propias manos.

Deixe um comentário